Gestión y formación
El cliente interno también QUIERE NORMALIDAD, el verdadero recurso es humano.
El recurso de poner ejemplos es una herramienta habitual para quienes nos dedicamos a la docencia. Es una manera de poner en valor aquellos casos que son para nosotros una referencia y que el alumno valore los resultados obtenidos cuando la gestión se realiza de manera adecuada, y viceversa.
Esta táctica, en ocasiones, no es muy efectiva por la generalización que conlleva, por ello, el éxito del método reside en el conocimiento de la mayor cantidad de experiencias. Para conseguirlo, investigamos, buscamos, hablamos, preguntamos y comprobamos como gestionan las empresas.
Cuanto mayor es el registro de datos, mejor es la aproximación a la realidad para alejarnos así de la generalización.
Durante estos meses de “confitado” han pasado por nuestras manos cerca de 200 alumnos, más de 200 valores individuales que forman parte de los equipos de otras tantas empresas de restauración. Historias guardadas en nuestra memoria con emociones encontradas CON UN DENOMINADOR COMÚN: actitud por mejorar en su trabajo y ser mejores profesionales.
Un alumno ya incorporado a su puesto, nos contaba feliz que ya tenían la sala llena de clientes y corroboraba algo que habíamos hablado tiempo atrás; ahora todos tenemos que hacer de todo, debemos apoyarnos para sacar esto adelante, CAMAREROS “polimultifuncionales”. Pero sigue fallando la gestión, somos la mitad de recursos para atender a los mismos clientes de antes,el gerente no quiere sacar a todo el personal por miedo a como pueda evolucionar el futuro.
El sector de la restauración está definido por el alto porcentaje de mano de obra, de recursos humanos que en la cocina elaboran los mejores platos y en la sala ponen en escena un protocolo de servicio concluyendo en el mayor de los disfrutes para el cliente.
Es este factor humano el que pone en valor la planificación del director de restauración y el que se esfuerza por buscar la excelencia.
El factor económico y el control de variables siempre debe estar presente, pero hoy lo dejamos en segundo plano y queremos dejar constancia de que son los valores humanos de nuestro equipo los que, de una manera vinculante, consiguen llegar con celeridad al punto de equilibrio.
El empresario del sector de la restauración debe seguir el camino de la valoración de su equipo, cuidar y formar, dirigir y controlar, exigir y retribuir. Solo así podremos conseguir que la profesión del sector adquiera la categoría de excelencia que le merece.
En el camino recorrido estos últimos meses hemos perdido mucho, la mochila de la vida ha mermado de recursos y lo peor es, que algunos son irrecuperables y otros se han visto seriamente afectados. Lo mejor, nos quedan las emociones y el recuerdo.
Mejorando nuestro conocimiento y con la responsabilidad podremos conseguir los objetivos planteados, pero no olvidemos que uno de los recursos más eficientes de que disponemos en el valor humano. CUIDÉMOSLE