1931 | El Greco, una taberna de «toda la vida».
Fuente: Andrés Revuelta.
Las tabernas son parte de nuestra tradición. Hacia el año 1600 ya había en Madrid más de 300.
Casi todas las fachadas estaban pintadas de color rojo para indicar a quienes no sabían leer dónde se vendía vino. Éste debía ir acompañado de una rebanada de pan con queso o embutido para tapar el vaso, origen de nuestras famosas “tapas”.
En pleno barrio de Chamberí, en la calle Blasco de Garay, nos encontramos con una el bar cervecería El Greco, una taberna de toda la vida.
Abierta en 1930 es traspasada y regentada desde 1931 por José Agustín Revuelta, abuelo del actual propietario.
Tomarse una caña o un delicioso vermú de grifo, con unos mejillones al vapor o con sus excelentes boquerones en vinagre es un auténtico privilegio.
11 comentarios
Sinceramente, que te pongan una tapa es un lujo muy típico de Madrid. En nuestro país, el bar de al lado es una prolongación de nuestro salón donde encontrarse con su parroquia y tomar un chato con su respectiva tapa. Qué maravilla que la prolongación de tu casa sea una de esas tabernas de toda la vida, donde los sabores son los de siempre. Gracias x el artículo.
Sitio magnífico con todo el «sabor» de lax tabernas madrileñas.
Enhirabuena Andres
No lo conocía. Pero ya solo con las fotos del jamón y de los boquerones iré esta semana sin faltar.
El Greco, uno de los mejores bares de Madrid, lo conocí de joven con 20 años, hoy, 37 años después sigo acudiendo y mis hijos con 25 también, es un local eterno. Es un sitio que no se puede nadie perder
Seguir contando con tabernas con tanta solera como esta es un auténtico privilegio. No olvidemos que este tipo de negocios forman parte de nuestra historia y arraigo cultural, y no permitamos que desaparezcan.
Me encantan estas pinceladas de nuestro Madrid. Muchas veces un recordatorio de donde volver a ir. Gracias por el artículo
Estuve hace poco ¡Y qué boquerones! Están buenísimos. La cervecita bien tirada… Las tostas también están muy ricas. Y Andrés es majísimo. Volveré.👏🏻👏🏻👏🏻
Muy buena crónica de un establecimiento excelente, de los que cada vez quedan menos. Apoyemos las tabernas madrileñas.
Muchas gracias Víctor.
El Greco, un bar en el que he vivido muchos momentos divertidos en mi infancia. Allí se reunía mi familia los domingos y allí tomé mi primer corto de cerveza con una tapa de anchoa con patata frita lo mejor! De eso hace 55 años, lo servían Hilario y Valetín, mientras su padre el Sr.Pepe hablaba con la clientela. Aun hoy lo visito, Bravo por el nieto que lo mantiene abierto!!
Tú lo has dicho, ¡bravo!. Gracias Mariví.
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